
«Es un ataque directo contra la mayoría de la sociedad e instituciones vascas»
La semana pasada, el Tribunal Supremo español falló en contra del Decreto 179/2019 del Gobierno Vasco, asumiendo la mayoría de las tesis presentadas en el recurso del partido político VOX. Como consecuencia, se han anulado varios artículos que permitían a los ayuntamientos y entidades locales de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa priorizar el uso del euskera en su relación con la ciudadanía, junto a otras medidas destinadas a la normalización de la lengua.
El decreto invalidado desarrollaba la Ley Municipal 2/2016, aprobada con amplio consenso en el Parlamento Vasco. Asimismo, la última Encuesta Sociolingüística ha demostrado claramente que una amplia mayoría de la sociedad vasca respalda las políticas orientadas a la normalización del euskera. Por tanto, esta sentencia pone en entredicho tanto el autogobierno de las instituciones vascas como la voluntad de la sociedad vasca.
En defensa del euskara y del autogobierno, más de 200 alcaldes y representantes municipales –de diferentes partidos y sensibilidades– junto a representantes del ámbito del euskera se han reunido en Bilbao, frente a la sede del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco.
Han denunciado que se trata de un ataque directo contra la voluntad democrática de la mayoría de la sociedad y contra las instituciones vascas, que rompe el consenso de las últimas décadas y daña gravemente nuestro autogobierno.
La declaración conjunta ha sido leída por Idurre Eskisabel Larrañaga, secretaria general de Euskalgintzaren Kontseilua.
DECLARACIÓN
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Hoy, una amplia representación del ámbito del euskara comparecemos junto a alcaldes y representantes municipales de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa ante la reciente sentencia del Tribunal Supremo español.
Concretamente, debido a que este tribunal, haciendo suyos los argumentos del partido ultraderechista Vox, ha anulado varios artículos del decreto que desarrolla la Ley Municipal vasca. La sentencia niega a los gobiernos locales elegidos por la ciudadanía la competencia para desarrollar con libertad una política lingüística propia para cada municipio, aun siguiendo la normativa vigente.
Es un ataque directo contra la voluntad democrática de la mayoría de la sociedad y contra las instituciones vascas, que rompe el consenso de las últimas décadas y daña gravemente nuestro autogobierno. Como consecuencia de esta sentencia, no se podrá priorizar el euskara en los ayuntamientos, ni siquiera cuando se utiliza conjuntamente con el castellano. En definitiva, si se quiere normalizar el uso del euskara en la administración, es necesario adoptar medidas concretas para que el euskara alcance la misma categoría que el castellano, tal como aspira la normativa vigente.
La situación es grave. El euskara es una lengua minorizada, resultado de siglos de prohibiciones y políticas de represión. Los agentes sociales que trabajamos a favor del euskara, junto con la Red Europea para la Igualdad de las Lenguas, ya expresamos que el euskara se encuentra en situación de emergencia lingüística, y, asimismo, las últimas investigaciones publicadas han puesto de manifiesto el riesgo de estancamiento y retroceso. Por otro lado, en los últimos meses, las instituciones vascas y los agentes políticos están realizando un esfuerzo considerable para que el euskara tenga oficialmente presencia en las instituciones europeas.
Justo en el momento en que más falta hacen medidas positivas para superar la situación de minorización del euskara, se multiplican las resoluciones judiciales que las obstaculizan y frenan su normalización. Ya sea anulando Ofertas Públicas de Empleo, o yendo en contra de leyes aprobadas con amplio consenso en el Parlamento Vasco, son ya unas 30 las sentencias que están debilitando la competencia de las instituciones vascas para llevar a cabo políticas lingüísticas.
Ante todo esto, hay que responder desde la unidad. Si no se toman medidas, aumentarán los obstáculos para quienes queremos vivir en euskara. Los derechos lingüísticos solo se convierten en derechos reales cuando pueden ejercerse en todos los ámbitos de la vida. Por ello, no podemos limitarnos a resistir los ataques, es hora de avanzar. Debemos reforzar la seguridad jurídica y, junto con los cambios legislativos necesarios, fomentar una actitud proactiva en la sociedad vasca con el mayor consenso posible, para garantizar los derechos lingüísticos de la ciudadanía y normalizar el uso del euskara.
Necesitamos el euskara y el euskara nos necesita. Porque el euskara es nuestra lengua, la que nos hace euskaldunes. Por eso, el movimiento a favor del euskara y los representantes municipales reafirmamos que el uso del euskara debe ocupar el lugar que le corresponde, y hoy adquirimos el compromiso de impulsar las medidas necesarias para ello. Es hora de ir más allá, de dar un salto en las políticas lingüísticas. De abrir el camino a una nueva era de revitalización.
Bilbao, 24 de julio de 2025.