Educar en euskara, crecer en igualdad
EDUCAR EN EUSKARA, CRECER EN IGUALDAD
El pleno del Parlamento Vasco celebrado el 14 de octubre de 2021 inició el procedimiento de modificación de la Ley de la Escuela Pública Vasca actualmente en vigor. Por tanto, se ha iniciado el debate y la aprobación de la ley que sentará las bases del sistema educativo de las próximas décadas.
La educación es el eje central en el proceso de recuperación de cualquier lengua en situación minorizada, porque las nuevas generaciones garantizan la competencia adecuada de la lengua minorizada y ello es clave para garantizar la cohesión social y la convivencia.
Hay que reconocer la aportación del sistema educativo en las últimas décadas: miles y miles de ciudadanas y ciudadanos se han euskaldunizado. Sin embargo, todavía estamos lejos de la universalización del conocimiento. Los datos muestran que el sistema de modelos actual presenta grietas. Sabemos cuál es el modelo más exitoso y cuál es el menos adecuado, pero hay que revisar el sistema de manera íntegra. Porque hoy por hoy a muchas alumnas y alumnos no se les garantiza el derecho a adquirir una competencia adecuada en euskara. Y recordemos que, tal y como se recoge en la Ley del Euskera, la administración tiene la obligación de garantizar esa capacidad, una obligación que se está incumpliendo.
Esto afecta directamente a la cohesión social y a la igualdad de oportunidades de las nuevas generaciones. De hecho, para avanzar en la vida social y en el desarrollo profesional es fundamental adquirir la competencia lingüística adecuada, la capacidad de expresarse cómodamente en euskara. Por eso decimos que garantizar ese conocimiento es imprescindible para avanzar en la cohesión social y la igualdad.
De acuerdo con el principio de igualdad, el origen, la situación socioeconómica, la situación sociolingüística u otros criterios no pueden condicionar las competencias que el alumnado debe adquirir, tanto en el ámbito lingüístico como en otras áreas de conocimiento. Por el contrario, sería una gran discriminación entre la ciudadanía el utilizar el origen, el ámbito sociolingüístico, la situación social o cualquier otro criterio para negar al alumnado la adquisición de una competencia lingüística adecuada. Al igual que en otras materias o ámbitos, en este caso la igualdad debe garantizar que se dé más a quien menos tiene. Por eso decimos que la opción más justa e igualitaria es la implantación de un nuevo modelo generalizado que garantice la competencia lingüística básica en euskara a todas las nuevas generaciones.
Por todo ello, tenemos claro que ahora es el momento de avanzar y dar el salto del sistema segregador de modelos actual a un modelo generalizado inclusivo.
El 19 de junio de 2021 más de un centenar de agentes presentamos la declaración Batuz Aldatu en el Palacio Kursäal de San Sebastián. La declaración Batuz Aldatu detalló las direcciones de las políticas lingüísticas del futuro. Así, los agentes acordamos que las políticas debían seguir dos ejes: la universalización del conocimiento y los espacios para el uso cómodo del euskera. Y, junto a ello, acordamos qué dirección debe seguir el sistema educativo: para educar al alumnado que se exprese cómodamente en euskera hay que establecer un modelo de aprendizaje generalizado. […] Tendrá que ser un modelo que no deje a nadie al margen y dé más a quien menos tiene.
Por ello,
Los agentes aquí reunidos solicitamos que en el pacto educativo se recoja expresamente que la próxima ley superará el sistema excluyente de modelos lingüísticos, y se implantará un modelo generalizado que garantice la competencia adecuada del euskara a todo el alumnado.
Y para ello nos comprometemos a:
Hacer nuestra esa petición y defenderla en los foros en los que participamos y/o en las relaciones que mantenemos con respecto a la ley de educación.
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