Acuerdo Bai Euskarari en municipios
En el año 2000, el acuerdo Bai Euskarari se extendió a los municipios. En primer lugar, se pusieron en marcha unas experiencias piloto, y después se generalizaron. De este modo, Kontseilua puso en marcha un proceso de compromiso a nivel local.
Estas dinámicas fueron impulsadas de forma conjunta con los ayuntamientos, ofreciendo así un marco y modelo flexible y adaptable para todos, que asimismo garantizaba la coherencia a nivel general. La clave de su éxito reside en la participación de los agentes sociales locales en el proceso por alcanzar compromisos concretos en pro de la normalización del euskara.